Avebury Waden Hill, UK (2009)
La formación nos recuerda lo sagrado de la sexualidad, la capacidad de poder regalar vida nueva.
Ella baja hasta la consciencia celular, al recuerdo de la creación de la vida. Nos es traído a la memoria lo sagrado del ADN.
Actúa positivamente para embarazos y concepciones, actúa estimulando esperma y ovarios.